Sistemas autónomos, celdas de combustible de hidrógeno, tecnologías eléctricas y de batería—estas son tan solo algunas de las formas en la que los camiones de minería están evolucionando, justo como las minas se están expandiendo operaciones y más minas están abriendo más camiones necesitan cumplir más exigencias—y, aún los avances en herramientas y metodologías para dar servicio y dar mantenimiento a los neumáticas de minería no les han sostenido el paso, ni superado, todos los desafíos de seguridad que se están acumulando.
Tan solo desde el 2018 hasta el 2023, hubo más de una docena de muertes relacionadas con el servicio a los neumáticos de minería. ¿Qué puede hacer la industria para lograr avances en la innovación de servicio a los neumáticos, junto con la innovación en los camiones, para proteger a los técnicos de neumáticos y cumplir también con las exigencias de las operaciones de la minería moderna? Como Kal Tire lo escribe, es necesaria la investigación colaborativa y el desarrollo de herramientas, prácticas, y sistemas, y de forma urgente, reducir el riesgo para aquellos que trabajan más de cerca con los neumáticos de mayor tamaño en la minería. El dar servicio a los neumáticos de minería siempre ha conllevado un riesgo. El apabullante peso y tamaño de los equipos de minería—combinado con las temperaturas y presiones de operación—se traduce en que, hasta las tareas más básicas, tales como las inspecciones y rotaciones, sean inherentemente peligrosas.
Se han tomado medidas en los últimos 20 a 30 años para mejorar la seguridad en el trabajo de servicio a los neumáticos. Por ejemplo, a través de la introducción de los sistemas de monitoreo de presión de neumáticos (TPMS, por sus siglas en inglés), y de los requisitos de competencia de los técnicos de neumáticos en países tales como Australia. Pero, los riesgos están evolucionando de forma veloz. Actualmente, el desarrollo rápido en los tipos de camiones y dimensiones, junto con el aumento de los objetivos de producción se traduce en que los sitios están presionando al equipo de la planta y a las herramientas de servicio a neumáticos a sus límites de operación. Estos factores, combinados con una escasez de trabajadores con destrezas, hacen que los técnicos trabajan bajo una presión en aumento, además el número de incidentes de seguridad relacionados con el servicio que se incurren de forma regular son una evidencia de que se debe hacer más por mantener a los trabajadores a salvo.
En un esfuerzo por hacer la diferencia en un ‘cambio de paso’ en el trabajo de servicio a los neumáticos, quizás sea momento de revisar formas en las que podamos cambiar los riesgos asociados. Si nos desafiamos a nosotros mismos en aras de encontrar formas para eliminar el riesgo, o considerar cambios en los controles de ingeniería, podemos lograrlo. La innovación – en el proceso, las herramientas, el equipo, – pudiese representar una forma de hacer más seguro el trabajo de servicio a neumáticos para todos.
Los riesgos de operar bajo presión
Algunos de los peligros más serios que los técnicos de neumáticos enfrenan están asociados con la energía que se almacena dentro de los neumáticos durante la operación. Si se instala de forma incorrecta el ensamblaje de la ferretería del neumático, o el anillo de seguridad, que asegura el ensamble, y llega a fallar, esto puede resultar en una liberación catastrófica de energía, que separa al neumático y sus componentes lanzándolos hacia la zona de trayectoria donde se podrían encontrar los técnicos.
Los incendios de neumáticos y electrificaciones (vehículos impactados por descargas eléctricas, suceden cuando éstos hacen contacto con las líneas de electricidad, o corren bajo condiciones incorrectas) los cuales representan otro riesgo serio. Bajo la exposición al calor, los neumáticos pueden sufrir pirolisis, o la descomposición del caucho. Esto produce gases que aumentan la presión interna de los neumáticos y pueden llegar a provocar una explosión. Estos incidentes pueden infligir lesiones serias o el deceso de trabajadores, y daño al equipo cercano.
De forma tradicional, el identificar el potencial de las condiciones no seguras dentro de un neumático depende de las inspecciones visuales realizadas por técnicos experimentados. La mayoría de las señales de calor y presión son invisibles desde afuera, así que la detección requiere que el técnico se acerque al neumáticos y utilice sus ojos, oídos y tacto, y hasta sus sentido del olfato, para determinar si es seguro rodar el neumático o no.
La introducción del TPMS a la minería a principios del año 2000 proporciona un descubrimiento crítico en seguridad, en este sentido. Con el TPMS, los sensores incrustados en cada neumático proporcionan lecturas en tiempo real de forma remota de la temperatura y de la presión en los equipos de servicio. Si los neumáticos se calientan en demasía, el sistema alerta a los conductores para que se detengan y los dejen enfriar, lo que reduce el potencial de incendios y/o explosiones.
No obstante, la tecnología TPMS solo puede leer temperaturas y presiones dentro de la cámara del neumático– mientras que algunos de los peligros reales radican en el exterior, como es el caso de las separaciones de la banda de rodada. Ha habido muchos casos documentados de incendios de los neumáticos en los vehículos de minería en los que el TMPS no alertó. Existen hasta 18 cm de caucho desde la banda de rodada hasta el recubrimiento interno, y con el caucho como un gran aislante, el neumático se puede incendiar antes de que la temperatura penetre hacia adentro de la cámara.
Conforme las minas usan progresivamente mas equipo autónomo, ¿cómo se pueden realizar las inspecciones de forma segura con el fin de que se reduzca la exposición de los técnicos a los camiones? Además del TPMS, la tecnología autónoma de inspecciones de neumáticos se ha desarrollado para detectar y reaccionar ante problemas críticos oportunamente—todo mientras se mantiene a los técnicos a una distancia segura. Sin ni siquiera necesitar detenerse, los neumáticos de camiones que van pasando se escanean en varias ocasiones, lo que revela problemas tales como daños en la banda de rodada y puntos calientes, que se señalizan, validan a través de un experto en monitoreo de condiciones, y se solucionan cuando es necesario.
Herramientas para aligerar el trabajo pesado
Otros de los peligros se relaciona con el tamaño y el peso de los neumáticos de minería que se elevan hasta casi 4-m de altura y pesan hasta 5-toneladas, cada uno. El manejo de los neumáticos junto con los rines y componentes asociados implica un riesgo de esguinces musculares y lumbares, machucones en dedos y aplastamientos de éstos.
La mecanización y el avance en las herramientas ha proporcionado mejoras de seguridad importantes en los últimos 30 años. Vale la pena notar que los desarrollos incluyen manipuladores de neumáticos, herramientas de soporte de anillos de seguridad, soportes para la preparación de los neumáticos, unidades automáticas de inflado/desinflado, conductores de arietes, rompedores de talón, y soluciones de izaje por medio de gatos.
No obstante, muchas de las herramientas/máquinas de servicio para neumáticos han cambiado poco desde su inicio, y para que sean efectivas se deben aplicar de forma correcta, así como inspeccionarse y mantenerse en buena forma. Algunas máquinas, en particular, como los manipuladores de neumáticos grandes, requieren de capacitación para su uso seguro, y el nivel de rigor puede variar de sitio en sitio
Las herramientas de mano pesadas que se utilizan para ciertas tareas de servicio, por ejemplo, las pistolas de torque que pueden pesar hasta 36-kilos (80lbs), también pueden llevar a que se susciten cortadas, moretones y esguinces musculares.
El papel de la capacitación y la certificación
Los programas de capacitación y la certificación para los técnicos de neumáticos también han avanzado mucho en los últimos años. En el pasado, los técnicos aprenderían en el trabajo de la gente que hacia las cosas a su manera, no necesariamente en la forma más segura. Potencialmente se heredaban malos hábitos, había pocos procedimientos disponibles, y la seguridad no era una prioridad.
Hoy en día, en muchas regiones, la capacitación es más exhaustiva y hasta estandarizada. En Australia, por ejemplo, los técnicos de neumáticos se deben evaluar como competentes a través de una organización de Capacitación Registrada (RTO, por sus siglas en inglés ) o estar bajo la supervisión directa de alguien que lo esté. El demostrar competencia involucra tareas tales como la remoción y remontaje de neumáticos de diferentes tamaños. La Asociación de la Industria de Neumáticos también ofrece capacitación en Servicios o para Neumáticos del Equipo de Minería (ETS, por sus siglas en inglés), incluye el aprendizaje y certificación de las destrezas básicas para el nivel de entrada, para técnicos de neumáticos con experiencia. Algunas compañías de servicio de neumáticos para minería también ofrecen su propia capacitación para asegurar que los equipos sean competentes en la realización de tareas de forma segura y en cumplimiento con el estándar de la compañía.
Una de las formas en que se puede guiar la consistencia junto con las mejoras prácticas, a través de los sitios, es con una dinámica del Sistema de Gestión de Aprendizaje que presenta los materiales en varios idiomas, procedimientos pictóricos de trabajo seguro, capacitación de los alumnos, y actualizaciones continuas y de seguimiento de los procedimientos.
Justo ahora, la responsabilidad/prueba de carga es con las compañías para asegurar que sus proveedores de servicio apliquen las mejores prácticas. De aquí en adelante, la estandarización global en la capacitación, que requerirá una colaboración entre la industria y los reguladores, se dirigirá en gran medida a los estándares de seguridad a través del sector. El trabajo de los técnicos de neumáticos necesita tanto estándares, como certificaciones, y un mayor reconocimiento por sus contribuciones. Actualmente, aunque los mecánicos automotrices requieren una certificación en algunos países, se asume que los técnicos de neumáticos para la minería realizan tareas que necesitan un nivel menor de debida diligencia—pero aquellos en la minería saben que el trabajo también es complejo y peligroso. Los técnicos altamente calificados y universalmente certificados solo podrían ayudar a proteger a los técnicos y a todos en el sitio.
A través de toda la industria y como parte de la capacitación, debe haber una mayor concientización de los riesgos al dar servicio a los neumáticos de minería—y de las serias consecuencias que se pueden suscitar cuando no se toman los pasos correctos, o no se utilizan las herramientas adecuadas.
Más allá del EPP: Enfocarse en los controles más efectivos
En la minería, el tiempo es dinero, y para los técnicos que están bajo presión de regresar las máquinas a servicio, a menudo existe un conflicto potencial entre hacer el trabajo rápido y hacerlo de forma segura. Mientras que las tecnologías, herramientas y capacitación, cada una tiene un papel que desempeñar para mantener a los técnicos a salvo, para que éstas sean verdaderamente efectivas, se deben implantar y enfocar en una forma de jerarquía.
Dan Allan, VP Sénior del Kal Tire’s Mining Tire Group, explicó: “La implantación de controles de alto nivel tiende a ser más efectiva que aquellas de una jerarquía de control menor. Con frecuencia en la minería, las reglas o el equipo de protección personal (EPP) se utilizan para mitigar peligros, pero estos no son suficientes. Es hora de pensar en la eliminación de peligros a través de procesos nuevos, o por medio de controles de ingeniería, como herramientas innovadoras para protegerse contra los peligros de forma más efectiva”.
En lugar de solo enfocarse en el EPP, es hora de repensar nuestro enfoque y buscar la eliminación del riesgo, ya sea a través de un proceso diferente o a través de la innovación. Aunque los controles administrativos y el EPP siempre serán una clave del trabajo seguro, estos son controles sencillos, y la responsabilidad está en los técnicos de aplicarlas de forma consistente. Mientras tanto, los procesos que sostienen el trabajo de servicio a los neumáticos no ha cambiado significativamente en años. El reinventar el trabajo—en lugar de añadir más reglas y rutinas—es más desafiante, pero los resultados son más probables de ser efectivos y permanentes, y por tanto, vale la pena ponerles más atención.
La necesidad de innovación en las herramientas colaborativas
Allan cree que la inversión actual para eliminar los peligros en el servicio de neumáticos es crítica, en lugar de trabajar alrededor de ellos. “Es por ello por lo que en el 2015 Kal Tire estableció su Centro de Innovaciones – con el fin de llegar al corazón de los problemas subyacentes y de hacer nuestro trabajo al volante lo más seguro posible”, comentó.
Un de los resultados de esta inversión es el Kal Tire’s GATR (Aparejo de Herramientas Asistido por Gravedad) que se desarrolló a través de la retroalimentación de los técnicos de la compañía. Las herramientas antigravedad como el GATR facilitan la carga física para los técnicos, al soportar el peso de las herramientas. “Son esenciales en la reducción de machucado de dedos, fatiga y esguinces musculares al montar los neumáticos OTR especialmente de los modelos de ultra-class”, dice Allan.
Kal Tire utiliza un sistema de rastreo de seguridad basado en la red para registrar incidentes, lesiones y percances de sus operaciones globales. Esta información proporciona el desarrollo de nuevas soluciones de seguridad y ayuda a cuantificar su efectividad, tales como la reducción de dedos machucados a través de los sitios, desde la adopción de una herramienta nueva para la remoción de seguros resorte, por dar un ejemplo.
Cómo se pueden apalancar los datos para tener un futuro más seguro
En el futuro, las introspecciones generadas a través de los sistemas de administración de datos se pueden utilizar para optimizar la planeación y ejecución del trabajo de servicio en comparación con varios controles de negocios, incluyendo la seguridad, y para cuantificar el impacto de estas actividades. Por ejemplo, en una mina en Columbia Británica a la que el Kal Tire’s Mining Tire Group le da servicio, se realiza una prueba que se enfoca en la recopilación automatizada de datos de presión en neumáticos del TPMS hacia OMS, el Sistema de Administración de Neumáticos y Operaciones de la compañía. Las introspecciones de prueba demostraron una reducción en el tiempo de inspección, lo que disminuyó la exposición de los técnicos a los neumáticos en un 40%.
La robótica y la automatización también podrían jugar un papel cada vez mayor en las prácticas de seguridad. La automatización es ya un lugar común en los procesos como la producción de los recauchados. La mayoría del trabajo manual en el pulido, construcción y ranurado se ha eliminado, y estos riesgos se podrían mitigar todavía más si la robótica se hace cargo del resto de las tareas, como alimentar al caucho en los extrusores.
“Conforme los sistemas automatizados se vuelven cada vez más económicos y factibles, existen muchísimas oportunidades de utilizar la automatización en el espacios del servicios de los neumáticos para eliminar peligros y riesgos” dice Allan. “El único límite a las aplicaciones de estos sistemas automatizados es nuestra propia imaginación.”
La seguridad es un blanco en movimiento
En resumen, las presiones que imperan se traducen en que los desafíos relacionados con la seguridad seguirán acumulándose en el trabajo de servicio a los neumáticos de minería.
Para que las herramientas de servicio, las prácticas, y sistemas le aguanten el paso a los desafíos que nos impone una industria cada vez más dinámica, se requiere de inversiones actuales y con un objetivo, así como de investigación y desarrollo colaborativos.
Allan añadió: “Con el fin de lograr un servicio a los neumáticos más seguro, mientras tanto las compañías necesitan trabajar muy de cerca con sus equipos, proveedores de servicio, OEMS(fabricantes de equipo original), organismos de capacitación y más. Llegaremos ahí más rápido y de forma más efectiva si trabajamos de forma conjunta”.
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